Fernando Alonso acaba con toda lógica
Las últimas dos carreras del asturiano son sencillamente asombrosas
Sus resultados no entraban ni en los pronósticos de su propio equipo
Además, han coincidido en dos de los circuitos menos favorables para Aston Martin
Los últimos dos resultados de Fernando Alonso se escapan de toda lógica, sobre todo en un deporte como la Fórmula 1 donde los datos lo son todo e influyen directamente en el rendimiento de los pilotos en la pista. Este fin de semana las predicciones indicaban que Aston Martin no estaba para más que decimocuarto o decimoquinto. Lance Stroll cumplió con las expectativas en la carrera del Gran Premio de Singapur (14º), mientras que su compañero no se conformó con ello y fue a por lo máximo posible desde la clasificación del sábado.
El asturiano anunció nada más poner un pie en el circuito de Marina Bay que Aston Martin llegaba siendo el «séptimo equipo» e incluso «octavo o noveno». Eso se reflejó directamente en la clasificación, en la que Stroll no pudo pasar del decimoséptimo escalón. Luego en la carrera remontó tres puestos, pero la verdadera exhibición fue la de su compañero, que pese a no arrancar como esperaba, se lució y exprimió cada oportunidad que le brindó el asfalto.
Alonso no pudo adelantar a Nico Hülkenberg en la salida, pero rápidamente varió la estrategia y paró en la vuelta 26 tras ser adelantado por Charles Leclerc, con quien peleó durante varias vueltas. Su undercut al piloto alemán de Haas dio un resultado increíble, y es que también le sirvió para mantener a raya desde la distancia a Checo Pérez, pegándose a Carlos Sainz en las últimas vueltas para acabar en octava posición.
Después de ser sexto en el GP de Azerbaiyán y octavo en Singapur, Alonso ha sacado de donde no había en circuitos donde el sufrimiento de su Aston Martin es máximo. La gran esperanza ahora con el piloto español es que su equipo acierte con un paquete de mejoras que se antoja obligatorio para Austin (GP de Estados Unidos). Porque en lo que respecta a su nivel, no se le puede discutir absolutamente nada.
Alonso sorprende a Aston Martin
A sus 43 años de edad, Alonso está viviendo una segunda o tercera juventud y lo positivo de la carrera en el trazado de Marina Bay es que su estelar actuación ya no estuvo a la sombra de los pilotos de arriba de la tabla. El asturiano no pasó desapercibido y la forma en la que llegó a pelear con los de Ferrari, que para él llevaban el mejor monoplaza, con uno de los peores coches de la parrilla, es encomiable.
«El resultado de carrera de Alonso es mejor que el mejor resultado que predecía nuestra estrategia», aseguró su jefe, Mike Krack, después de la finalización de la prueba en Singapur. El luxemburgués añadió que «con el Ferrari» fue «difícil porque tenían más ritmo», pero el asturiano sí que batió al Haas de Hülkenberg y al Red Bull de Pérez.
«Podemos estar contentos. Por la mañana le hemos dicho que el mejor resultado posible era alrededor del 9º, y somos octavos sin que nadie de los rivales haya abandonado, así que hay que estar contentos», zanjó Krack, al que le ha tocado la bendición de contar con un Alonso a su mejor nivel en su garaje. Además, lo más positivo quizá es que debido a los últimos acontecimientos ha recuperado lo más importante y lo que hace soñar a miles de aficionados españoles: la sonrisa.